En el campo de las finanzas, ¿cómo se puede diferenciar un buen inversor de alguien que no lo es? ¿Acaso deberíamos juzgarlo simplemente por
Los buenos inversores se reconocen por sus cualidades, una serie de caracteres naturales propios y adquiridos que estas personas tienen en común. Unos atributos que distinguen a un inversor corriente de un buen inversor.
¿Quieres saber cuáles son estas facultades? Pues te invito a que continúes leyendo porque a continuación vamos a tratar algunos de los aspectos más destacables que todo inversor debería tener para disfrutar de la condición de buen trader.
Las cualidades de un buen inversor
La capacidad para entender los mercados
Todo buen inversor debe tener esa capacidad de comprensión hacia los mercados, debe tener esa intuición natural para saber por qué se comportan como lo hacen según las circunstancias. Los mercados, aunque volátiles e impredecibles, no dejan de moverse con cierta lógica.
Así que sí eres capaz de analizar los factores que afectan al comportamiento y prestas especial interés a la psicología del trading posiblemente llegues a estar cualificado para comprender y controlar la dirección de las tendencias, sea cual sea la situación del mercado.
Cuanto más te entiendas con los mercados mucho más favorables serán los resultados de tus operaciones, hazme caso. Además, con la práctica irás adquiriendo experiencia e incluso podrás desarrollar la habilidad de saber cuándo entrar a operar en los mercados.
La disciplina para saber cómo actuar
Posiblemente esta sea una de las cualidades más importantes y la que realmente defina al perfil de un buen inversor. La disciplina es una característica que te permite actuar siempre en el mejor momento, analizando la situación del mercado y las posibles consecuencias de tus actos. La disciplina es una aptitud que te ayuda a invertir con criterio y de la forma más conveniente en cada momento.
Los inversores que tienen esa capacidad de saber estar y mantenerse tranquilos, sean cuales sean las circunstancias del mercado, son más propensos a manejar las situaciones con más responsabilidad. Estas personas tienen la capacidad de pararse a pensar y actuar cómo mejor les convenga, sin dejarse llevar ni influir por sus sentimientos o emociones.
La disposición para aprender de los errores
Un buen inversor debe tener esa disposición para aprender de los errores. Así es como uno consigue hacerlo mejor la próxima vez. Sí bien invertir en los mercados financieros tiene sus riesgos lo cierto es que el factor humano también influye en cierto modo en los resultados obtenidos. Hay que entender que tanto los buenos resultados como los malos no solo se deben al mercado sino también a nosotros mismos.
Los mercados pueden tener un comportamiento inestable pero cómo inversores debemos tener esa capacidad para determinar cuándo actuar y cuando es más recomendable mantenerse a la espera de un momento más adecuado.
Aprender de los errores es una capacidad que no tienen todos los inversores y realmente es algo muy importante. Evaluar siempre todas las inversiones, tanto sí tiene éxito como sí no, te ayudará a mejorar y aumentar tus rendimientos.
La destreza para gestionar el capital
No hay que olvidar que estamos invirtiendo capital y cuando se trata de dinero hay que tomarse las cosas enserio. La gestión del capital es tan importante como la disciplina para invertir. Así que sí pretendes convertirte en un buen inversor es interesante que sepas que la correcta gestión del dinero te proporcionará más oportunidades de ganar.
La destreza para manejar el dinero, apostando a veces importes más cuantiosos y otras veces distribuyéndolo en pequeños montos para diversas operaciones es lo que minimizará tus posibilidades de incurrir en pérdidas y por ende, te hará aumentar tus opciones de tener éxito.
Recuerda que la diversificación es fundamental para disfrutar de equilibrio en las inversiones.
La habilidad para desarrollar estrategias
Los buenos inversores marcan la diferencia porque son capaces de elaborar y desarrollar las estrategias más adecuadas, según las circunstancias del mercado, para obtener los mejores rendimientos en todo momento.
Sí tienes la habilidad para crear un plan de inversión con unos objetivos realistas a cumplir y eres capaz de equilibrar el factor de riesgo/beneficio no tendrás problema para invertir con éxito.
La planificación de las inversiones es fundamental, y desarrollar las mejores tácticas de inversión te proporcionará unas inversiones mucho más rentables. Sólo tienes que saber que estrategias utilizar según la situación del mercado y estar alerta para cazar las mejores oportunidades de negocio.