Una de las últimas noticias que nos llega es sobre Google, que ha sido sancionado con una multa de competencia 
Evidentemente, Google ha expresado su desacuerdo.
Glosario del contenido del artículo:
- Sanción por prácticas abusivas
- Siete años de investigación
- Una multa de record
- Otras prácticas monopolistas
- Google considera apelar
Se trata de la sanción más elevada de toda la historia de la Unión Europea y será Google quien tendrá que pagar esta cuantiosa multa, y además, también tendrá que ponerle fin a esta abusiva práctica en un plazo de 90 días, según han aclarado desde Bruselas.
En caso de que no cumpla con las exigencias de la Comisión Europea se le impondrán otras sanciones que podrán ir hasta el 5% del volumen de negocio diario en todo el mundo de su matriz, Alpabet.
Sanción por prácticas abusivas
En los detalles de la sanción se acusa al gigante de Internet de abusar de su posición dominante en el mercado de motores de búsqueda, el cual asciende al 90% de cuota, para beneficiar de manera ilegal a Google Shopping, su propio servicio de comparación de precio.
Desde la Comisión Europea esperan qué Google respete el principio de igualdad de trato entre su comparador y los demás comparadores, y que no continúe favoreciendo a sus propios servicios y anuncios de pago, de lo cuál por desgracia la mayoría de los usuarios no son ni conscientes.
Los servicios europeos de Competencia después de rastrear 1.700 millones de consultas de los usuarios en Google llegaron a la conclusión de que este motor de búsqueda no era para nada neutro en cuanto a la selección de contenidos ofrecida a los usuarios.
Hasta ahora, lo que estaba haciendo Google bajo las normas europeas era algo ilegal, ya que estaba negando la oportunidad a otras compañías de competir en las mismas condiciones, y por otro lado también estaba negando a los propios usuarios y consumidores europeos el poder tener una verdadera oferta de servicios para elegir.
Siete años de investigación
Fue en noviembre del 2010 cuando Bruselas lanzó este expediente después de varios meses de pesquisas preliminares. La tramitación de este caso ha sido muy lenta, pero parece ser que por fin se está pudiendo llevar a cabo.
Después de varios intentos para conseguir una solución pactada con Google sin multas y el repetido fracaso de los mismos, la estrategia cambió y directamente se optó, hace un par de años, por enviar un primer pliego de cargos a la compañía.
En abril del 2015 por fin se denunciaba el trato favorable y sistemático de Google a su comparador de precios en los resultados de búsquedas de los usuarios a nivel general.
Durante siete años se estuvo observando las prácticas de Google al detalle, y durante el mandato de Joaquín Almunia se trató de llegar a un acuerdo sin éxito.
Almunia dejaba “el caso Google” para la próxima Comisión, así que su sucesora, Margrethe Vestager, se encargó de poner fin a este caso, y le abrió un expediente sancionador a Google.
A día de hoy se trata de uno de los casos que más quejas ha acumulado, y todo por la presunta discriminación de Google a sus competidores cada vez que los usuarios quieren utilizar el buscador para comparar precios y/o para buscar cualquier producto en su web.
Una multa de record
La Comisión europea sanciona a Google con una multa record, que supera aquella que en su día el Ejecutivo comunitario le impuso a Intel en 2009 y que ascendió a 1.000 millones de euros.
Con esta multa, de 2.420 millones de euros, Google también supera el total de las multas que ha tenido que pagar Microsoft y con las cuales se alcanzan 2.200 millones de euros.
Por lo que respecta a las normas de competencia de la Unión Europea lo que ha hecho Google es ilegal, pues durante todo este tiempo ha estado impidiendo a los consumidores europeos tener la oportunidad de beneficiarse de la posibilidad de elegir entre servicios aprovechándose de esta innovación.
Por supuesto, Bruselas también tiene justificación para la elevada multa a Google, y es que consideran la infracción muy grave, tanto por las prácticas en sí cómo por la duración de la misma, ya que llevan haciéndolo desde que empezó el año 2008.
Con estas prácticas ilegales el tráfico a su propio servicio de comparación de precios aumentó significativamente en España, mientras que a su vez, las compañías rivales mantenían pérdidas evidentes y permanentes.
Otras prácticas monopolistas
Por otra parte, además de la sanción a Google por el abuso de su posición dominante en el mercado de motores de búsqueda, según sabemos en este momento el ejecutivo también mantiene abiertos un par de expedientes más en contra del gigante de Internet, por su sistema operativo móvil Android y su plataforma publicitaria de AdSense.
Asimismo, este caso también podría servir de precedente para otros servicios de Google, cómo los buscadores de vuelos y hoteles y los mapas online. Aunque por ahora no se han dado detalles de cómo se aplicarán. Pero ya lo iremos viendo con el tiempo.
Google considera apelar
Por su parte, y cómo era de esperar, Google no está conforme con la multa que le ha impuesto la Comisión Europea y así lo ha hecho constar a través de un comunicado oficial.
En este comunicado desde la multinacional dejan claro que no están de acuerdo con las conclusiones anunciadas y que lo revisarán con la Comisión para tomar una decisión.
De hecho, consideran apelar para poder seguir exponiendo sus argumentos.
Según los argumentos ofrecidos por Google, cuando alguien compra en línea quiere encontrar los productos de la forma más rápida y del mismo modo que los anunciantes quieren también promocionarlos.
De esta forma es como han querido justificar los Shopping Ads, los cuales son muy útiles para poder conectar rápidamente a los usuarios con miles de anunciantes, tanto pequeños como grandes.